martes, 19 de abril de 2011

COMPRENSIÓN Y RAZONAMIENTO

CONGRESO DE COLOMBIA
La comprensión está definida como la capacidad de la inteligencia para entender y conocer las cosas (Conceptos, argumentos, ideas, leyes, imágenes) y el razonamiento es la serie de conceptos y argumentos encaminados a demostrar algo.
Entre los dos se concibe nuestra manera de comprender y relacionarnos con el entorno y los demás seres humanos. Igualmente ambos están sujetos a la subjetividad que nuestros patrones culturales y educativos delineen, pues a un testigo de Jehová no habrá forma de hacerle comprender y razonar que una transfusión sanguínea puede salvar su vida; pues la mezcla de conceptos culturales y educativos originados en sus preceptos religiosos no le permiten entender este criterio médico.

Es por esta razón que cuando se establecen y crean reglas para la convivencia social, estas deben ser lo más absolutas y categóricas en sus definiciones para minimizar al máximo las diferentes apreciaciones o explicaciones y argumentos para un único asunto tratado.

Leía por estos días que en el 2002 el canal Catarí de televisión Al-jazeera, era considerado por el departamento de estado Norteamericano como un medio que hacía apología a la desinformación y el terrorismo, tanto que en algún momento el presidente Bush bromeo con la idea de bombardear la estación de Televisión; ahora 9 años más tarde la secretaria de estado Hillary Clinton, elogió a la estación de Televisión por su contenido real, en una presentación que hizo frente al senado de su país, nuevamente patrones externos y coyunturales como la nueva situación política condicionan el razonamiento y la comprensión de un sujeto o de una situación hasta presentarlas en el otro extremo más radical.

Después de relacionar estos 2 ejemplos quiero señalar que en nuestro país la legislación esta errando seriamente por su carácter ambiguo e indefinido, permitiendo múltiples interpretaciones y conceptos para una misma situación a evaluar; el caso que de inmediato nos da suficiente argumentación fue la intención de otorgar el permiso a la compañía minera Greystar para explotar una concesión en el paramo de Santurbán; mientras el ministerio de Minas tenía unas normas suficientemente claras y rígidas frente a la explotación minera en la zona de páramos Colombianos; quien debía otorgar la licencia ambiental, el ministerio del Medio Ambiente, detentaba unas leyes más blandas sustentadas en unos conceptos cartográficos y sentencias técnicas del instituto Humboldt, mas las propias regulaciones e interpretaciones de los funcionarios al interior del ministerio.

Como las leyes se establecen para proteger los derechos de las mayorías sobre los intereses de las minorías, es desde todo punto de vista execrable esta disparidad de leyes o la vaguedad en la redacción de otras.

En este momento que están en el centro del debate la ley de “modificaciones a la ley 30 de1992 que organiza el servicio público de educación superior” y la ley “Por el cual se regula la responsabilidad por las infracciones al derecho de autor y los derechos conexos en Internet” nuevamente se vislumbra esta ya incesante costumbre de escribir normas con escasa claridad para obligarnos a tener una ínfima comprensión y razonamiento sobre los fines y alcances de estas leyes. Por esto comprendemos los planteamientos de los representantes legales de las compañías de producción fonográfica y de los recaudadores de derechos de autor que defienden con ahínco estos nuevos reglamentos para que se aprueben con todas estas limitaciones, para así poder seguir manteniendo sus inmensos intereses financieros intactos, sin importarles que el legislador nos condene a una brutal censura originada en que las compañías prestadoras del servicio de conexión a Internet ante el más mínimo asomo de duda sobre violaciones al copy Right, procederán a desmontar sus contenidos y así ahorrarse costes administrativos y judiciales innecesarios.

Ante estos claros hechos hay que exigirle a los parlamentarios Colombianos más severidad y menos ambigüedad en la elaboración de leyes que afectan de manera tan sensible el conocimiento, la educación, la protección al medio ambiente, la privacidad en las comunicaciones y el desarrollo tecnológico de los Colombianos. Esta es la campaña que debemos asumir todos.

2 comentarios:

  1. Yo sumaría otra "Perla" para exigir más severidad parlamentaria; en el año 2006 la Corte Constitucional sentenció la Justificación del Aborto en tres casos: 1. Violación, 2. Riesgo para la Madre y 3. Malformación del Feto. Ahora, el Senador y Jefe del Conservatismo José Darío Salazar en un Afán Electorero mezclado con un Misticismo Peligroso, quiere criminalizar todo el aborto, con la ayuda de la Iglesia Católica y ciertas Iglesias de Garaje.

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  2. Creo que estas dos citas complementan "comprensión y razonamiento":
    De Bachelard: "De hecho, la objetividad científica no es posible si, de antemano, no se ha rehusado la seducción del primer acercamiento, si no se ha roto con los pensamientos nacidos de la primera observación. Toda objetividad, debidamente verificada, desmiente el primer contacto con el objeto. La objetividad debe, de antemano, criticarlo todo: la sensación, el sentido común, la práctica incluso más constante y también la etimología. Lejos de maravillarse, el pensamiento objetivo debe ironizar, debe ver lo que es".
    De Krishnamurti: "Uno tiene que andar por sí mismo, ha de estar solo en ese viaje, tiene que ser su propio maestro y discípulo. Cuando usted ve, no en conformidad con otro, entonces el ver lo convierte a usted en el maestro y en el discípulo. Entonces usted es el maestro, el enseñado, la enseñanza misma. El mirar es su gurú. La verdad no se halla en cierto lugar distante; está en la observación de lo que es. Véase uno mismo tal como es, en estado de alerta donde no entra ninguna forma de elección, es el principio y el final de toda búsqueda. El hacer no está separado de lo que es. El aprender es disciplina y rechazo de toda autoridad".
    @marinogiraldo

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