Desde que este ¿militar o ex militar? Ascendió al poder a través de la elección popular nos ha ido sorprendiendo más con sus frases, cuestionamientos, insultos y comparaciones sobre lo humano y lo divino, expresadas vehementemente, desde que este pintoresco tiranillo imperial así lo crea conveniente para su mediática campaña mundial.
Ha insultado a presidentes, reyes, opositores y a todo aquel que desde su paranoica perspectiva le puedan estorbar; pero aun así no podemos olvidar que este cantinflesco hombre llego al poder, escogido por un pueblo descontento con una dirigencia nacional embriagada en sus excesos de autoridad y corrupción, que se había puesto de espaldas a sus conciudadanos pobres sin la mas mínima aprensión y pudor; a este panorama debemos agregar su extraño comportamiento en el que el despótico señor se atreve a expresar ser la reencarnación del celebre libertador Simón Bolívar, su delirante admiración por Fidel Castro que es como su mentor personal y su total animadversión al gobierno Norteamericano, que el ve como su mayor enemigo y fuente de todo el mal mundial.
Adicionemos también su interminable fuente de recursos económicos gracias a las gigantescas reservas y exportaciones petroleras de su país, a su astucia y elocuencia verbal para someter a sus caprichosos y delirantes conceptos a presidentes y lideres mundiales como Cristina Fernández de Argentina, Luis Ignacio Lula da Silva de Brasil, José Luis Rodríguez Zapatero de España.
Su ideario político es una extraña mezcla del antiguo sistema absolutista estatal soviético y cubano entreverado con su particular y tropical concepto de democracia e igualdad social llamado Socialismo del siglo XXI, que proyecta su imperial imagen como único mesías y salvador de los mas desfavorecidos en nuestra América Latina actual.
Colombia por su condición de vecino mas cercano y por su compleja violencia política interna es su mayor fuente de entretención para disimular sus fracasos y excesos en su ejercicio del poder; aunque nosotros no debemos subestimar a este señor y tampoco olvidar que nuestros lideres han pecado mucho como los de Venezuela, antes de Chaves y todo esto es solo tierra abonada para que este mesías de pacotilla, ubique un personaje en Colombia que le siga su juego y se nos convierta toda esta historia en la peor pesadilla que podríamos vivir.
Debo terminar esta modesta opinión, recordando que este reyezuelo izquierdista, desea ser el emperador de una nueva Gran Colombia que el anhela reconstruir; para todo esto ha ido edificando con mucho esmero relaciones profundas con otros líderes cuestionados de relevancia mundial como el presidente Iraní, el primer ministro Ruso, quien es el verdadero dueño del poder en su país, los líderes de Siria y Libia, todos ellos opuestos radicales a los intereses Norte Americanos en el mundo presente; aparte de tener a su servicio a una corte de lideres compuesta por Nicaragua, Ecuador y Bolivia que asienten sin pensar y dudar todas las ideas de este demente imperial.
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