lunes, 4 de marzo de 2013

AMBIGÜEDAD Y DOBLE MORAL




Rajoy y Piñera
Fotografía  web del Ministerio de relaciones exteriores de Chile
La postura humana a nivel de ideología o de promesa que mas comúnmente se asume es la de la ambigüedad; y como bien lo define el RAE, es un dicho que puede entenderse de varios modos o admitir distintas interpretaciones y dar por consiguiente motivo a dudas, incertidumbre o confusión, por ello la gran mayoría de las personas la adoptan para aplicarla en muchas situaciones y circunstancias del diario vivir.

La actitud ambigua nos libra de la responsabilidad de responder por acciones u omisiones, proporcionándonos una aparente tranquilidad, anestesiando de paso nuestra conciencia o moralidad

De hecho somos muy dados a juzgar con doble rasero las situaciones, dependiendo del momento, de la oportunidad en la que nos encontremos y de la favorabilidad que nos proporcione el juicio con doble moral.

Escoger cual es el grupo social humano, la nacionalidad o la congregación política o religiosa que mejor defina esta práctica resulta complejo, pues son muchos los candidatos que reúnen con todo lujo, las cualidades que representan este atributo.  

Entrando en materia expondré diversas situaciones en las que la ambigüedad y la doble moral repugnan por su extremo fariseísmo.

Escudriñando desde los partidos políticos hasta en las sectas religiosas, finalmente encontré una característica común para asumir este hábito, son estamentos humanos llenos de tradicionalismo en donde la posición predominante  es el apego a las instituciones y costumbres que defienden antiguos valores en oposición al modernismo y la evolución de la sociedad.

De ahí que resulten tan oscuras contradicciones, en donde de una parte hablan de las excelsas calidades morales y virtudes cristianas, pero no dudan en mandar a exterminar o a asesinar a los contradictores.

En nuestro país es común asumir esta ambigüedad moral de cargar camándulas y asesinar por encargo, propinando una muestra de la transformación del concepto moral para caer en el estado de la doble moral; y es un flagelo que nos azota a diario, jóvenes de escasos recursos son el instrumento de organizaciones paramilitares, de narcotraficantes y de individuos que usan este accionar  para eliminar competidores, deudores o simplemente personas que puedan obstaculizar un negocio.

En niveles internacionales causa hilaridad las engañosas opiniones sobre la libertad de expresión que aseguran proteger gobiernos como los de Venezuela, México, Colombia, Ecuador y Honduras, lugares en donde periodistas y comentaristas de opinión sufren persecuciones, por manifestar su posición en contra  de las camarillas establecidas en el poder o de los grupos al margen de la ley.

Por los lados del gran coloso de norte, son reconocidas sus posturas de exigir respeto por los derechos humanos que se desprecian en el medio oriente y latino América, pero a su vez no son aplicados con la severidad que ellos demandan a los demás, como sucede con su sistema judicial, en donde se presenta  el aberrante caso de los presos de Guantánamo que no poseen parámetros legales definidos para el territorio continental de Estados Unidos y así juzgarlos o el proceso contra el cabo Manning sindicado de filtrar información a wikileaks, soldado al que se le han violado derechos fundamentales y que han sido ampliamente reseñados.

Pero quien sin duda se lleva todos los honores gracias a la promoción de la doble moral son muchos de los actuales jerarcas de la  prístina iglesia católica. El último en reconocer su rosario de equivocaciones ha sido el cardenal escoces Keith O’Brien reconocido por sus posturas en contra de la comunidad gay, pero que ahora ha sido señalado como autor de conductas de acoso sexual en contra de sacerdotes que han estado bajo su mando, siendo este hombre otro mas en la larga cadena de purpurados envueltos en encubrimiento a sacerdotes pedófilos o atrapados en relaciones homosexuales escandalosas, a pesar de ser los mayores contradictores de este tipo de comportamiento.

Se concluye  que  ante estos acontecimientos, es un hecho aplicable aquel refrán popular que proclama “dime de que presumes y te diré de que careces” para todos estos hipócritas que agitan las banderas del sectarismo moral o los que posan de muy éticos y para los que presumen de ser los adalides de la defensa de la libertad de expresión; todos ellos finalmente resultan carentes de la virtud que pretenden amparar.

Cierro reflexionando de como los políticos de Iberoamérica parecen inscritos todos en esta práctica de la doble moral o es la condición necesaria para ejercer tal profesión, creo que no se escapa alguno a este señalamiento en todo el subcontinente latino Americano y en la península Ibérica, lo que me lleva a un serio cuestionamiento, realmente bajo el gobierno y mando de que elementos humanos es que nos encontramos y hasta cuando les permitiremos que nos continúen engañando y aprovechándose de nuestra candidez y sumisión.

Como siempre les invito a considerar sobre lo que hoy he expuesto.         

1 comentario:

  1. Hoy en día la Ideología como tal murió, las extremas izquierda y derecha utilizan los mismos métodos de represión y exterminio para dominar....

    ResponderEliminar