DECADENCIA DE LOS VALORES Y VIRTUDES HUMANAS

Diseñador Ilker

En medio de la profusa variedad de informaciones que semana a semana circulan en los medios, meditaba sobre aquellas particularidades del carácter humano que tienden a disminuirse, gracias a la incesante búsqueda de poder económico, de escalamiento social y de figuración política.

Honestidad, sinceridad, respeto, equidad, gratitud, generosidad, prudencia, perseverancia, responsabilidad y humanidad parecen atributos condenados a la extinción.

Aun así llamó gratamente mi atención, leer las prudentes declaraciones del periodista francés Roméo Langlois, durante el evento de su liberación, después de su cautiverio a manos de la guerrilla colombiana, en contraste con las alteradas comunicaciones entregadas a través de twitter, con respecto a este mismo evento por el ex presidente Uribe, simbolizando y profundizando con esta actuación el tono inapropiado y temerario de sus declaraciones   a las que ya nos hemos ido acostumbrando, pero que deterioran cada día mas su imagen de líder equilibrado de una nación.

Pero este simple episodio manifiesta la carencia actual en el género humano, de muchas de estas importantes cualidades que corresponden a los valores humanos.

Desde el estado Vaticano y su inmensa lucha de poder, continuando por la inmensa mayoría del mundo político y financiero, hasta llegar a los ciudadanos del montón, nuestro mundo contemporáneo se mueve tras un cúmulo de actuaciones sórdidas y aberrantes; con expresiones de violencia extrema e inaudita que infringen en su totalidad el respeto por los valores humanos; y es así como nos encontramos con sucesos como la demencial violación y tortura a una mujer en Bogotá, o la provocadora actitud del descuartizador canadiense que tras de asesinar a su pareja homosexual en Montreal, envía partes de su cuerpo a las principales agrupaciones políticas y difunde su hazaña por internet, o el desconcertante ataque caníbal practicado por un indigente a otro hombre de sus características en Miami, acciones que configuran las imágenes de una sociedad humana cada día mas enferma y alejada por completo de toda fibra de virtudes morales.

Corrupción, especulación, fraude, extremismo político, terrorismo, agresividad extrema, codicia sin fin, insolidaridad y deshumanización total son los atributos mas comunes a los que nos enfrentamos hoy en día en nuestra cotidianidad.

Considerar que el cardenal Tarciso Bertone está envuelto en frías maniobras  conspiradoras para retomar el poder del solio de san Pedro, para el ala mas conservadora de la iglesia católica, no deja de originar mucho desconcierto; este domingo 3 de junio el diario italiano la República, nuevamente ha publicado extractos de documentos que involucran al prelado en nuevas intrigas y manejos convenientes a su causa por el poder, tras la muerte del actual papa en ejercicio.

Descubrir que el gobierno alemán ha estado vendiendo submarinos con capacidad de ser dotados con misiles de mediano alcance, equipados con ojivas nucleares al estado de Israel, es otra escandalosa noticia que denota la imprudencia y la falta de responsabilidad de los políticos germanos, al equipar con estas poderosas armas de destrucción masiva a un gobierno archiconservador y delirante por la guerra; es como arrojar gasolina para sofocar una fogata; muchas explicaciones deberá entregar la canciller alemana ante esta denuncia efectuada por la prensa de su país, que visualiza el desequilibrio de poderes y armamento que reina en el medio oriente, zona del mundo sometida a demasiada tensión política y militar.

Ojala este nuevo equipo militar en manos de los lideres judíos no sea el detonante del camino al temido Armagedón, gracias a la obsesiva visión militarista del primer ministro Netanyahu en contra de la república de Irán.

Terminando este episodio, meditaba sobre el desinterés y la insensatez del ciudadano promedio en aportar a la solución de los problemas que nos afectan en sociedad.

Ahora que mi región se encuentra a portas de soportar en menos de 9 meses una nueva convocatoria a elecciones, se habla desde ya de la gran apatía por expresar el apoyo en las urnas, eligiendo al candidato de  preferencia o castigando con el voto en blanco a los postulantes, gracias al descontento que generan estos aspirantes al cargo de gobernador; pero no existe el compromiso y la responsabilidad de gran parte de la ciudadanía, que asume con la mayor comodidad que una pequeña minoría que cumple sus deberes como ciudadanos por compromiso o por convicción, elijan y dispongan para todo el colectivo a la persona y formas de administrar los recursos públicos, que afectan el destino y el progreso de todos.

Valores y virtudes, palabras anticuadas que han perdido mucha credibilidad en la individualista e insensible sociedad humana actual, y que de no corregirse nos precipitarán a dificultades mas complejas dentro del entramado social.

Es inquietante encontrar hoy por hoy en Colombia, que para muchos de nuestros jóvenes resulta mas atractivo económicamente participar en actividades ilícitas, que estudiar y luchar para emplearse con salarios que a duras penas resuelven las necesidades básicas, siendo deplorable; pero   demuestran como estas condiciones de iniquidad salarial no ayudan a desestimular este accionar, y elevan nuestros niveles de inseguridad urbana e intimidación.

Como a menudo propongo, los invito a reflexionar si aun podemos recuperar algo de estos atributos morales perdidos, para mejorar el bienestar general.