Jairo Varela en Caffetto 15-05-2008 |
En
medio de la euforia originada por la magistral demostración de pundonor
deportivo, que nuestros jóvenes representantes en los juegos olímpicos le entregaban
al país, de nuevo otros bárbaros muchachos integrantes de las Farc, se dedicaban
a derribar torres de energía y a dinamitar sub-estaciones eléctricas en el
occidente de la nación, constituyéndose en el mejor método de propaganda
electoral a favor de su archí enemigo Uribe
y su facción centro democrático.
Deben
los miembros de la guerrilla tener una
ceguera política total o son los cómplices solapados del famoso grupo de
derecha extrema, pues no hay explicación inteligible para tan inoportuno
proceder, que con su demostración de violencia irracional, solo concede amplias
justificaciones a la plataforma política de este grupo ultra-conservador y a su
obstinado propósito de despotricar del gobierno en ejercicio.
Regresando
al extraordinario desempeño cumplido por nuestros deportistas, ahora se espera
que se promuevan e instauren medidas y políticas
para auspiciar en mas jóvenes promesas el arrojo necesario para practicar con
esmero la disciplina deportiva de su predilección y obtener nuevos éxitos, retirándole
nuevos postulantes a la violencia
interna general, además de lanzar sobre el resto del colectivo el concepto de
que el esfuerzo y el sacrificio producen méritos para alcanzar la victoria y el
triunfo personal, principios que bien valen restablecer en nuestra decadente
sociedad.
Dos
maneras de actuar, una construyendo patria, la otra deshaciendo la nación en
medio de la inconsistencia de ideas, la brutalidad de un conflicto empantanado,
sin mayor sustento ideológico, con una sociedad que le toca asistir sumisa al
desarrollo de las hostilidades y sus consecuencias, entre las que se destacan
el sacrificio de muchos chicos y el empobrecimiento mayor de extensas zonas de
la geografía nacional debido al cambio de destinación de recursos de inversión en
educación, infraestructura, salud o saneamiento ambiental hacia la guerra,
dinero que mejor ayudaría a canalizar toda ese esfuerzo de los nuevos
guerrilleros en metas mas nobles como las deportivas, perseguidas por los 104
muchachos colombianos que asistieron a Londres.
Otro
hecho que muestra nuestro incoherente comportamiento y que fue noticia
relevante en la nación, fue el espectáculo originado por el fallecimiento del reconocido músico chocoano
Jairo Varela, hecho convertido en carnaval trasnochado, hacia un hombre que
hace escasas semanas había celebrado sus 30 años de actividad artística con un
concierto en el que no recibió apoyo
alguno por parte del público o de los medios locales y nacionales; por ello resulta incomprensible
que ahora la ciudadanía y los medios noticiosos hayan realizado semejante
demostración pintoresca de aprecio al músico fallecido, cuando hace pocos días le
habían dado la espalda con la poca difusión y asistencia a su concierto de aniversario.
Francamente
pertenecemos a una sociedad muy impulsiva, que actúa sin evaluar los
acontecimientos, obedeciendo a indeliberadas motivaciones, justificación para
nuestros habituales comportamientos apasionados, polarizados y violentos, que no parecen tener fin.
3
acontecimientos discordantes registrados en menos de una semana, que reflejan
nuestra falta de coherencia y de reacciones lógicas en el actuar del colectivo,
motivo de estudio para psicólogos, antropólogos, sociólogos y politólogos haber
si pueden aclarar un poco esta descabellada manera de proceder.
los deportistas de los juegos de los próximos juegos olímpicos quedaron con el mismo apoyo que los anteriores casi nulo y lo de jairo varela es otro representante de la cultura que le hacen homenaje después de muerto a si es Colombia
ResponderEliminarCarlitos, no se va a llegar a nada, los sociólogos, politólogos, abtropólogos y psicólogos, estudian seres humanos...y si hay algún pueblo desprovisto de "humanidad", es el nuestro, qué pesar...
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