Inicio esta
reflexión motivado en las espantosas prácticas que este grupo de asesinos
ejecutan en nombre de una creencia espiritual, contradiciendo el mandato de cualquier
credo religioso, el cual preserva el derecho a la vida como bien supremo.
El primerode febrero de 2011 escribí sobre cómo los sucesos de la primavera árabe
preveían desenlaces funestos para Egipto, puesto que arrastraban al pivote del
medio oriente hacia el caos y el desgobierno. Luego el 28 de enero de 2013,
nuevamente expresé mi opinión sobre la inestabilidad que ya invadía la región
con Mohamed Morsi, representante de los Hermanos Musulmanes en el mando. Se
preveía una escalada en el desequilibrio del poder en toda la cuenca
mediterránea oriental desde Libia a Siria. La puja de poder entre Teherán Y
Riad con el apoyo de los aliados en cada bando aumentaba en efervescencia,
llevando a Siria el aliado incondicional de Irán al caos de una cruenta guerra
civil.
Después de
cuatro años de guerra civil en Siria, aturde que ante la consolidación en esa
zona del para-estado de DAESH y de sus repetidas demostraciones de poder
militar, integradas con un inmenso despliegue de medios, el viejo continente actúe con tan poca resolución para eliminar el monstruo creado hace cuatro años
por sus servicios secretos y de los norteamericanos, con el fin de derrocar a Bashar
Al-asad.
Actualmente
y solo gracias al concurso de Vladimir Putin encontramos un cambio de táctica
que ha impulsado también a Francia herida por los ataque de París, a realizar
una campaña de bombardeos con mayor efectividad para así destruir la espina
dorsal de la economía ilegal del para-estado, la explotación, refinación y
transporte para exportación de petróleo.
El DAESH es
un invento de un lunático, Ibrahim Ali al-badri al-Samarrai, catedrático iraquí
con la elocuencia necesaria para congregar a un ejército de desposeídos en
torno a él, además cuenta con las desinteresadas
ayudas de la familia real de Arabia Saudita y la de Qatar, dinero sin el que
este falso califa jamás hubiese tenido el éxito actual. Igualmente hay que
agradecer las valiosas colaboraciones en el entrenamiento militar para sus
combatientes, de todo el sistema de servicios secretos de Italia, Reino Unido, Francia
y Estados Unidos, además de la invaluable
ayuda de Recep Tayyip Erdogan, presidente de Turquía quien facilita la ruta de
entrada de armas y de salida del petróleo robado por los combatientes del
DAESH. Como se puede comprender ¡Un grupo de desinteresados en preservar la paz
del Medio Oriente y ahora de Europa!
¿Pero porque
todos estos ángeles del terror se unen en torno a este proyecto? Esa es la
siguiente pregunta que muchos en las redes sociales se hacen. La respuesta
tiene muchos ingredientes.
Económicos
por el gas natural que es el combustible del siglo 21. En las costas de Siria y
el Líbano existen reservas fuertes del combustible.
Estratégicas-económicas,
el gasoducto en construcción financiado por los rusos y los alemanes,
denominado South Stream que entraría en funcionamiento desde 2017, pasa por
Siria trayendo gas iraní con destino a una terminal en el Líbano o en la misma
Siria, para ser exportado a Europa. Ergodan de Turquía está embarcado en otro
plan de construcción de gasoducto con socios canadienses, norteamericanos y
europeos este proyecto denominado Nabucco para funcionamiento en 2018, recoge
gas de las ex-repúblicas soviéticas de Georgia y Azerbaiyán, vía Bulgaria con
destino al centro de Europa. Propósitos como ven en franca competencia.
Políticas porque Estados Unidos sueña con
eliminar a al-Assad y sustituirlo con un líder más cercano a sus propósitos
geopolíticos, aislando en mayor grado a Irán, postura compartida por el archí
rival de los persas, Arabia Saudita. A esta apuesta también se unen la
coalición europea de Washington y se oponen Rusia y China, quienes también
tienen sus intereses en la zona. Ergodan también mira con buenos ojos que Siria
pierda territorio para él deshacerse de los molestos Kurdos quienes desde hace cien
años luchan dentro de Turquía por tener un estado independiente. Israel también
gana con la partida del presidente Sirio porque elimina un molesto vecino socio
de su peor enemigo Irán. Religiosos porque Saudíes y Cataríes desean imponer
el islam sunita sobre el chiita en Siria e Irak donde aún hay presencia Chiita
importante y con ello auto proclamarse como los líderes de todo el mundo
musulmán dejando a los chitas solo en Irán.
En síntesis
hay muchos motivos que generan el desinterés inicial de eliminar al DAESH,
hasta los atentados del 13 de noviembre en París.
Pero como no
todo se puede calcular desde el frío análisis de inteligencia militar y política,
el líder del DAESH se auto-proclamó califa creando un para-estado con fronteras
en territorios de Siria e Irak con el fin de erigirse en el jefe mundial de
todos los musulmanes, como lo predice una supuesta profecía islámica. De ahí
que haya logrado atraer a su causa a europeos hijos o nietos de inmigrantes
árabes, quienes en sus estados de origen como Bélgica, España, Francia o
Inglaterra son parias de la sociedad blanca.
Esta inesperada reacción ha permitido a su
ejército de simpatizantes a ejecutar atentados exitosos en el corazón de Europa,
porque los realizan europeos aunque estos sean de piel oscura y pueden
desplazarse sin ningún obstáculo por todo el territorio del continente, como lo
demostró el belga Abdelhamid Abaaoud presunto autor intelectual de los
atentados en París.
El futuro
luce incierto puesto que eliminar a esa medusa que representa ISIS es tarea
compleja, los europeos y sus servicios de vigilancia aun no pueden calcular el
influjo de las propuestas de Ibrahim Al-barrai sobre los jóvenes musulmanes
europeos, de tal manera que terroristas al acecho pueden haber muchos.
Europa y su
dirigencia deben dejar de hacerle el juego a los llamados halcones
conservadores norteamericanos, quienes desde hace dos décadas vienen
incendiando al mundo con sus nuevas propuestas geopolíticas, desde el Irak de
Hussein, a quien jamás se le encontraron las tenebrosas armas de destrucción
masiva. De nuevo lo formalizaron al desestabilizar a Libia, luego enmiendan a
la carrera situando a un militar en Egipto, al Mariscal Abdelfatah Al-Sisi después
de destituir a Morsi y así mismo lo practicaron en Siria sembrando los pilares
del descontento en Homs y Deraa, lo cual lleva a ese país a la actual guerra
civil, con las consecuencias enunciadas a través de esta reflexión.
Triste es este
mundo en el cual estrategas económicos y políticos quienes jamás sufrirán
consecuencia alguna, lanzan a la muerte a cientos de miles sin el menor
escrúpulo, no importa que sean palestinos, israelíes, egipcios, sirios, franceses,
españoles, griegos, rusos, ingleses, estadounidenses o latinoamericanos, somos
ciudadanos del montón que no tenemos valor ni peso trascendental alguno.
Los invito a
meditar este artículo y a opinar sobre otras razones que justifiquen la
existencia de este bárbaro califato.