Presentación Nuevo Mando militar 21 de febrero de 2014 |
Fotografía pagina web presidencia de Colombia
Parece una historia salida de la ficción creada por la mente
pródiga de un escritor agudo, ¡pero no! Es la alucinante realidad colombiana,
que cada semana nos sorprende con un nuevo capítulo de intolerancia política,
de crispación ciudadana, de murmuraciones y chismes disfrazadas de
investigaciones periodísticas ejecutadas con libreto establecido, por cizañeros
camuflados de comunicadores sociales, de espionajes e intervención de teléfonos
y correos privados con alcances inusitados, como los datos personales del
presidente de la república, de terrorismo contra líderes políticos distantes al
establecimiento, de asaltos cometidos por la subversión, de investigaciones
ejecutadas por instituciones sin autoridad constitucional, para inspeccionar
documentos y acciones de funcionarios aforados, de crímenes cometidos a destajo
a lo largo y ancho del país, realizados por extorsionistas y delincuentes de
todas las pelambres, de líbelos incendiarios redactados y recopilados por
escritores y candidatos de la extrema derecha.
Y detengo esta perorata so pena de colmar aun varias páginas,
con los interminables disparates, trastornos, injusticias e insensateces que
suceden en todo momento en este país.
Lo desolador corre por cuenta de que la generalidad de
sucesos transcurren por cuenta de la inmadurez política, la corrupción
desmandada y la codicia de algunos colombianos que como el director de
orquesta, ejecutan la partitura al son de su batuta y para ello comprometen a
todos sus ejecutantes, aun algunos en el alto gobierno o entre los mandos
militares superiores, además de algunos funcionarios jefes de los organismos de
control y vigilancia.
¿De donde provienen y quienes se benefician de estas hazañas
conspiradoras?
Al igual que en la frase inmortalizada por Shakespeare en el
pasaje de la muerte de Julio Cesar, “Tú también Bruto” culpar a un solo
personaje y reconocerle la alevosía, la astucia y la fuerza de persuasión para
inducir a tanta gente a realizar acciones que bordean la ilegalidad, resultaría
desmesurado o estaríamos describiendo a un súper hombre dotado de inmensa
maldad e inteligencia genial, tesis poco probable, porque como imagino muchos
vaticinaron a Uribe, mas él no es tan brillante; pero si es presumible que todo
este confabulación sea la obra de un conventículo de ultra derechistas,
interesados en crear anarquía, para sacar provecho de ella y así favorecer la
instalación de un gobierno de facto que sea acorde a sus necesidades de
preservar todos los antiguos privilegios, las arbitrariedades, el nepotismo y
la tiranía, que surge cuando estas camarillas se transforman en los redentores
de una democracia maquillada como era en la Grecia antigua en donde solo los
ciudadanos de las Polis intervenían en las decisiones, pero que es solo
realmente el regreso de un pasado despótico y totalitario en donde los únicos
beneficiados son la facción reinante y sus lacayos.
Les expongo este pensamiento que encontré en los anales de la
historia como un ejemplo del razonamiento de quienes están suscritos en la
derecha recalcitrante antagónica a cualquier solución negociada. “Todas las protestas habidas obedecen a una
conspiración masónica izquierdista, de la clase política, en contubernio con la
subversión comunista-terrorista en lo social, que si a nosotros nos honra a
ellos les envilece”; lo curios es, que no es una frase de los ideólogos y amigos
del Centro Democrático, es una vieja frase de Francisco Franco el dictador
español, tesis que no dista de los socios de Uribe, con lo que es probable
suponer que muchos de nuestros actuales problemas tienen su origen en gente
perteneciente a este sectario grupo, quienes buscan a través de la anarquía la
llegada de una asonada militar, que nos salve del colapso que ellos han
manipulado.
Entre todos debemos cerrarle el paso enérgicamente a estos
perpetradores, denunciando ante las autoridades al menor indicio de mas
provocaciones contra las instituciones legítimamente establecidas o ante
cualquier asomo de nuevas adulteraciones de la verdad a través de sus lacayos
en los medios de comunicación.
Si creemos que tenemos derecho a un futuro mejor, estamos en
la obligación de defender lo poco que tenemos de institucionalidad y democracia,
y ante ello estamos ineludiblemente convidados a preservarla, esa es la
reflexión que les dejo y con la que me despido por hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario